El masaje tantrico, particularmente sensual, tiene como primer objetivo la conciencia del cuerpo, fuera del control del mental, lejos de los gestos y comportamientos automáticos de la vida diaria.
En la tradición tantra, estos movimientos despiertan la inspiración en la mujer y las fuerzas vitales en el hombre. Aunque pueda realizarse sin acto puramente sexual, es perfecto para los hombres y mujeres que necesitan hacer circular su energía sexual, erotizar su relación.
Para los adeptos a esta filosofía, el masaje tántrico es una experiencia sensual y espiritual al mismo tiempo.